
Que se retrase un vuelo no solo es un fastidio, sino que puede arruinar tus planes, hacerte perder conexiones y causarte un estrés innecesario. Si te estás preguntando: "¿Me devuelven dinero si mi vuelo se retrasa?", no eres el único. Cada día, miles de pasajeros en Europa y EE. UU. tienen la misma duda. Así que vamos a aclarar tus derechos, qué leyes te respaldan y en qué casos podrías recibir una compensación o reembolso.
Aquí en Europa tenemos una de las leyes más potentes de protección al pasajero: el famoso EC261/2004. Básicamente, si tu vuelo se retrasa más de tres horas por culpa de la aerolínea, podrías tener derecho a una indemnización.
Así funciona:
Retrasos de 3+ horas: Si llegas a tu destino con más de tres horas de retraso y fue por un problema de la aerolínea (como fallos técnicos o problemas operativos), puedes pedir una compensación.
¿Cuánto te toca?: Según la distancia del vuelo, podrías recibir entre 250 € y 600 €.
Excepciones: Si el retraso se debió a algo fuera del control de la aerolínea, como mal clima, riesgos de seguridad o situaciones políticas inestables, entonces no tienen que pagarte nada.
Y ojo, esta ley aplica si tu vuelo sale de un aeropuerto de la UE o si lo opera una aerolínea europea, aunque vayas fuera de Europa.
Bueno, allí la cosa cambia. No hay una ley federal como el EC261/2004. Cada aerolínea tiene sus propias reglas para reembolsos o compensaciones por retrasos.
Lo más importante que debes saber:
Retrasos y reembolsos: Si tu vuelo se retrasa bastante y decides no volar, podrías tener derecho a que te devuelvan el dinero por la parte del billete que no usaste. Lo que se considera un "retraso importante" depende de cada aerolínea.
Comodidades y ayuda: Algunas aerolíneas dan vales para comida, noches de hotel o te reubican en otro vuelo si el retraso se alarga mucho... pero ojo, que no siempre lo hacen.
Esperas en pista: En Estados Unidos, el Departamento de Transporte (DOT) obliga a las aerolíneas a dejarte bajar del avión si llevas más de tres horas esperando en la pista en un vuelo nacional.
En Europa, el reglamento EC261/2004 marca claramente cuándo toca compensación por retrasos. En cambio, en EE. UU., todo depende de lo que diga cada aerolínea y su política de atención al cliente. En Europa, reclamar suele ser más directo; en Estados Unidos, el enfoque va más por el lado del reembolso, no tanto por compensar molestias.
La respuesta rápida es: Sí, pero depende de la zona y de la situación.
En Europa, si tu vuelo se retrasa más de tres horas y la culpa es de la aerolínea, lo más probable es que te toque compensación. En EE. UU., podrías recuperar tu dinero si el retraso es muy grande, pero que te paguen por las molestias no es lo habitual. Siempre revisá bien las reglas de la aerolínea y lo que dice la ley en tu país.
Guarda todo: Boarding pass, recibos, mensajes de la aerolínea... todo puede servir como prueba.
Infórmate bien: Echale un ojo al reglamento EC261/2004 si estás en Europa, o a las normas del DOT si estás en Estados Unidos.
Contacta con la aerolínea: Lo primero es presentar una reclamación formal. Podés usar su web, correo o cualquier canal que tengan para atención al cliente.
Pide ayuda a los expertos: Hay servicios como Trouble Flight que se encargan de reclamar compensaciones por retrasos o cancelaciones de vuelos. ¡Te lo ponen fácil!
Si vas o vienes de aeropuertos grandes como JFK en Nueva York, LAX en Los Ángeles o Heathrow en Londres, prepárate: los retrasos ahí son pan de cada día por la cantidad de tráfico. Ciudades europeas como París, Frankfurt o Ámsterdam tampoco se salvan, sobre todo cuando todo el mundo viaja en vacaciones.
Además, si se suma el mal tiempo, fallos técnicos o restricciones del control aéreo, los retrasos se disparan. Por eso, si vuelas desde o hacia alguno de estos sitios, ten en cuenta que puede haber cambios de última hora y no está de más conocer bien tus derechos.
Retrasos en los vuelos... un rollo, sí, pero no tienes por qué aguantarte sin más. En Europa, el reglamento EC261/2004 te respalda para reclamar cuando el retraso es importante. En EE. UU. se centran más en los reembolsos, pero igual conviene saber qué opciones tienes: puedes ahorrarte disgustos (y dinero).
Si no estás muy seguro de lo que te corresponde, mejor habla con alguien que sepa. Hay especialistas que entienden el mundillo de las aerolíneas y te pueden echar una mano para que consigas la compensación o el reembolso que te toca.
Viaja con la tranquilidad de saber que tienes derechos, tanto si cruzas el charco como si te quedas por Europa.